Aunque el fenómeno no es nuevo, el hecho de que Jorge Durán Silva, un concejal ya tradicional en el escenario electoral, diga que esta es una de las campañas "más corruptas en términos de dinero" deja entrever que la situación comienza a preocupar hasta los políticos más curtidos.
Casos como el de Daniel García, un joven candidato al Concejo capitalino, son muy dicientes: inscribió a 23 ediles y a las pocas semanas se quedó solo con 8. "Se me fueron 15 porque les ofrecieron plata en otras campañas, y ahí sí ni modo", dice resignado.
EL TIEMPO - 7 de Octubre de 2007.